En el marco del proyecto “Metales Tóxicos en Joyería: Protocolos de Evaluación” IMDEEA/2011/135, financiado el IMPIVA y cofinanciado por fondos FEDER, AIMME ha desarrollado los protocolos de trabajo que permiten a las empresas de los sectores de joyería y bisutería asegurar el cumplimiento de los requisitos generales de seguridad establecidos por el Reglamento REACH.

Con el desarrollo de este proyecto, el Instituto se ha situado a la vanguardia europea en el desarrollo de protocolos para evaluar la conformidad de tales artículos con el Reglamento REACH y la Directiva de Seguridad   General de Productos.

Los resultados del proyecto en el ámbito de la joyería y la bisutería han contribuido notablemente en la elaboración de Reglamentos derivados de REACH, caso de las restricciones al cadmio [(UE) 494/2011]   o las restricciones a las sustancias CMR [(CE) 552/2009], y actualmente AIMME está inmersa en el proceso iniciado por la ECHA* con el nuevo proyecto de Reglamento destinado a restringir el plomo por contenido o liberación (vía sudor, saliva o jugos gástricos) en esta gama de productos.

El Reglamento REACH afecta al Sector metal-mecánico en dos frentes:

1) Las sustancias clasificadas por su Anexo XIV como SVHC (altamente preocupantes): sales de cobalto o plomo, óxidos de cromo y cromatos

2) Las sustancias y mezclas contenidas en materiales metálicos homogéneos (aleaciones, soldaduras y recubrimientos) sometidas a restricciones establecidas en su Anexo XVII, tales como el níquel el cadmio y las sustancias clasificadas como CMR (cancerígenas, mutágenas o tóxicas reproducción)   por el reglamento CLP: plomo, cobalto, antimonio, selenio, arsénico, molibdeno, mercurio, cromo, etc

El primer frente incide en los sectores de tratamiento superficial: industrias galvánica, de pintura o de esmalte porcelánico y, de consumarse su prohibición, estos sectores y los de los productos que los utilizan se verían seriamente afectados.

El segundo incumbe muy directamente en la salud y seguridad de las personas e interviene en un vasto catálogo de productos de consumo de uso individual tales como joyería, bisutería, gafas, accesorios metálicos para artículos de moda y complementos, envases y soportes de cosméticos, prótesis, telefonía móvil,   llaves, etc.

En los últimos 20 años, a través de diferentes proyectos de I+D+i, AIMME ha trabajado en el perfeccionando múltiples métodos y protocolos de ensayo. Sirva de ejemplo el caso de la liberación de níquel en artículos en contacto con la piel:

–    AIMME es uno de los dos únicos Centros europeos que cumplen con las exigencias establecidas para el patrón de referencia a utilizar.

–   AIMME dispone de un método propio, fiable y asequible para la determinación de la superficie desarrollada por objetos de geometría compleja, basado en la tecnología de fabricación de circuitos impresos.

ECHA: Agencia Europea de Sustancias y Preparados Químicos